Mientras que nuestros últimos artículos se han centrado en el concepto de circularidad, las estrategias circulares y los indicadores para medirla, ahora queremos detenernos en lo que entendemos por “ciclo de los materiales”. Uno de los objetivos clave de la circularidad es «circular productos y materiales (en su mayor valor)». Pero para hacer circular los materiales o productos, primero tenemos…
La transición hacia una economía circular tiene como objetivo cerrar los flujos de materiales para reducir los residuos, utilizar los recursos de forma más eficiente y minimizar los impactos ambientales. Pero ¿cuáles son las estrategias que pueden establecer las empresas para conseguirlo? A este respecto, Potting et al. (2017) aplican un marco (Fig.1) útil para definir 9 estrategias R, agrupándolas…
El estudio de impacto ambiental basado en el Análisis del Ciclo de Vida realizado por la Cátedra UNESCO de ESCI-UPF y publicado en la revista científica Resources, Conservation and Recycling reveló las ventajas de este sistema. El análisis del ciclo de vida de las cajas permitirá seguir mejorando su desempeño ambiental con iniciativas enfocadas a aumentar la cantidad de plástico reciclado en la fabricación de las cajas o la eficiencia del uso de recursos en el lavado de estos envases.
Actualmente, el modelo productivo más habitual se basa en extraer recursos naturales para producir bienes, que son consumidos y, finalmente, eliminados en forma de residuos. Este modelo lineal se fundamenta en la premisa de una hipotética disponibilidad ilimitada de recursos, que no contempla los límites y los impactos asociados a la generación de residuos. Frente a la insostenibilidad de este modelo, la economía circular (o circularidad) se plantea como una alternativa sostenible.
Las cajas de plástico reutilizables generan un 25% menos de impacto ambiental que las de cartón de un solo uso en la distribución de frutas y hortalizas en España. Esto es así en cinco de las seis categorías de impacto ambiental analizadas por el estudio comparativo de las diferentes opciones de distribución de frutas y hortalizas en España mediante el Análisis de Ciclo de Vida (ACV) llevado a cabo por la Cátedra UNESCO de Ciclo de Vida y Cambio Climático (ESCI-UPF)
El 80% de los envases y embalajes que se utilizan para el transporte de productos frescos a las principales (Top 10) cadenas de distribución agroalimentaria en España son reutilizables, lo que sitúa a España entre los primeros países europeos en el empleo de este sistema, que optimiza los recursos y genera menos residuos.
Los envases de plástico reutilizables que se utilizan en la distribución agroalimentaria tienen un ciclo de vida útil de 20 años y pueden ser reutilizados hasta en 100 movimientos, lo que supone enormes ventajas medioambientales, ya que permiten ahorrar recursos y reducir los residuos, según un estudio del Instituto Fraunhofer y la Universidad de Stuttgart sobre la sostenibilidad de los sistemas de embalaje en Europa.